domingo, 6 de enero de 2008

Magia



Cada 5 de enero, mamá cuenta la misma historia mínimo 2 veces... Resumo: Día 5 en la cabalgata de Las Palmas de G.C. Papá tiene cogida a hombros a su hija pequeña, osease yo. Baltasar pasa tan exótico y glamuroso como siempre, pero sobre todo tan negro como siempre (con esto pretendo lanzar una queja a esos Reyes Magos rociados de pintura-color-pococreíble). Rey negro dice a niña de 3-4 añitos aproximadamente: Acuéstate prontito, que esta noche voy a verte. Niña pequeña con mirada ilusionada, mágica y completamente crédula, no para de dar por culo con que se quiere ir a casa.


Imagino que me acosté tan pronto como nunca, e intenté dormirme tan tarde como nunca también, aunque no lo conseguí. A la mañana siguiente los camellos se habían bebido su agua y los Reyes se habían tomado su vaso de leche con galletas.



Definitivamente, este último año, he sido una niña buena. Sus Majestades, los Reyes Magos de Oriente, se han acordado mucho de mí, en diferentas casas y comunidades... Así que he decidido seguir viviendo como hasta ahora (es decir, nada mal), seguir haciendo lo que hasta ahora (o mejor dicho, no haciendo), pero sobre todo seguir siendo como hasta ahora.

No hay comentarios: